jueves, 3 de noviembre de 2011

Nwankwo Kanu. El gigante africano



El sábado pasado se produjo un hecho muy difícil de conseguir, un jugador consiguió un hat-trick como visitante en Stamford Bridge. El jugador fue el holandés del Arsenal Robin Van Persie, que está firmando uno de sus mejores años en la Premier y ayudó a su equipo a salir con un 3-5 de casa de los blues. Pues bien, el último jugador que consiguió el mismo hecho fue el gran Nwankwo Kanu, en el mes de Octubre de 1999 vistiendo también la camiseta del Arsenal (aquí el video). Y que mejor momento para recordar a este gigantón que enamoró a Europa y honró la camiseta de su Nigeria natal. Nacido el 1 de Agosto de 1976, desde pequeño destacó por su altura y por su calidad individual con la pelota. A pesar de su 1’97 esta no le quemaba, la protegía con su corpachón y conseguía goles y regalaba asistencias a sus compañeros.

Empezó su carrera en un modesto club nigeriano, el Fed Works, del que pasó a un equipo de mayor nivel en Nigeria, y al año siguiente, la siempre acertada cartera de ojeadores del Ajax, se lo llevó a Holanda en 1993, por una cifra cercana a los 250.000 dólares (con lo que eso significaba para el futbol africano) y su nombre comenzó a conocerse en Europa. Formó parte del equipo de Van Gaal durante tres años, en los que conquistó su primer y más importante título , la Copa de Europa de 1995 ante el AC Milan, en la que salió desde el banquillo unos minutos. En 54 partidos con los tulipanes anotó 25 goles y su nombre se dio a conocer definitivamente tras los juegos olímpicos de Atlanta 1996. Allí Kanu capitaneó a la selección Nigeriana, que consiguió un hito histórico, la medalla de oro que arrebataron al Brasil de Ronaldo y Bebeto en semifinales, y a Argentina en la final.



Ese parecía uno de los mejores años de la vida de Kanu. Fichó por algo más de 5 millones de euros por el Inter de Milán y fue elegido como Mejor jugador africano del año. Sin embargo, el destino le tenía una desagradable sorpresa; tras un análisis médico en Milán le descubrieron una malformación de la válvula de la aorta, imponiéndole un brusco y repentino stop a su ya brillante pero todavía breve trayectoria en el escenario mundial.

Kanú declaró años después que: “Los médicos del Inter decían que nunca volvería a jugar y que mi vida corría riesgo. Fueron siete meses espantosos que nunca olvidaré. Todo lo que había construido con esfuerzo parecía derrumbarse, pero no dejé de luchar. Viajé a Estados Unidos para operarme en una clínica de Cleveland y al año regresé a los campos de juego”. Esa cruda experiencia le motivó para crear una fundación (Kanu Heart Fundation) que ayuda a niños que padecen problemas cardiacos.

Tras la vuelta a los terrenos de juego, y no disfrutar en Italia, Arsene Wenger le reclutó para el Arsenal. Su partido de debut es uno de los partidos más curiosos que se recuerdan. A los pocos minutos de salir al campo, con 1-1 en el marcador en un partido de F.A ante el Sheffield, centró un balón que su excompañero Overmars convirtió en gol, sin darse cuenta que un jugador rival estaba tirado en el suelo. El partido acabó con 2-1 y al finalizar, el entrenador gunner ofreció que se repitiese el partido ya que consideraba antideportiva su victoria. Así se hizo y el Arsenal se hizo con la victoria otra vez por 2-1. En Highbury Kanu desarrolló su mejor juego, y fue pretendido por varios equipos importantes. En 1999 fue de nuevo proclamado Mejor Jugador africano, y consiguió en el 2004 el doblete con los “gunners”, F.A y Premier League, y dejando goles espectaculares, también en competiciones europeas, como este que le marcó al Deportivo de la Coruña . Poco a poco y sobre todo debido a la aparición de Thierry Henry, acabó siendo relegado a la suplencia (de hecho es el jugador que más veces ha salido como sustituto en la Premier League) y tras 5 temporadas, fichó por un recién ascendido como el West Bromwich Albion.



Allí permaneció dos temporadas, en las que destacó por ser en su primer año el fallo más clamoroso de la temporada. Participó en el 2006 en el homenaje a su compañero y amigo Dennis Bergkamp siendo ovacionado en el recién estrenado Emirates Stadium y cuando acabó su contrato fichó por el Portsmouth como agente libre. Allí Nwankwo recuperó parte de su futbol, y se convirtió en un jugador importante para el club portuario. En su segunda temporada consiguió su tercera F.A con una participación activa, anotando el gol en la semifinal y el gol de la victoria en la final ante el Cardiff City. Este verano se retiró del futbol internacional en un homenaje en Nigeria en el que el público el público desplegó pancartas de homenaje al emblemático futbolista de 34 años: “Kanu, eres nuestro ídolo, siempre te querremos”, “¿Quién será como Kanu?” o “¡Rey Kanu!”. En ese partido estaban grandes compañeros y rivales que no quisieron perderse la despedida del Gran Kanu, entre ellos, Samuel Eto’o, Rigobert Song, Stephane Mbia, Jean Makoun , Eboué y así una larga lista.



Tras una carrera marcada por su corazón, tanto en lo físico como en lo emocional, el gigante ha visto como un “gunner” ha vuelto a hacer tres goles al Chelsea, y seguro que se alegró. Desde aquí nos alegramos de haberle visto jugar.

@DavidMenendez14.

2 comentarios:

Leyendas y Conspiraciones dijo...

Sencillamente impresionante.

4 de noviembre de 2011, 4:17
futbolytu dijo...

Muchas gracias Diego, siempre nos ha gustado ayudar a recordar a grandes jugadores, o presentarselos a los que no los conocían.
Un saludo.

8 de noviembre de 2011, 23:26

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