viernes, 10 de junio de 2011

Goles naranjas 1

 Debido al fichaje de Ruud Van Nistelrooy por el Málaga del jeque Abdullah Bin-Nasser Al-Thani, en futbolytu hemos decidido hacer un pequeño homenaje a varios delanteros holandeses de primer nivel que han jugado en nuestra Liga en los últimos años.
Por todos es sabido el nivel futbolístico de Holanda, no en vano son subcampeones del Mundo, y pese a la final por todos recordada de dicho Mundial, los ‘’Oranjes’’ suelen destacar por su juego ofensivo, y atractivo para la vista del espectador. Numerosos jugadores holandeses han jugado en nuestra liga, muchas veces en el mismo equipo (el Barcelona de Van Gaal, o el Madrid de hace un par de años), y algunos de ellos han dejado huella en los aficionados de este deporte.

JIMMY FLOYD HASSELBAINK
                                       
Jimmy ‘’Pichichi’’ Hasselbaink (léase con el tonillo de la canción del Puente sobre el rio Kwai), es un delantero retirado nacido en Surinam, el 27 de Marzo de 1972. Como otros muchos jugadores nacidos en la antigua colonia holandesa (Seedorf, Davids o Rijkaard) Jimmy eligió jugar para la selección de los Países Bajos. Pero para llegar a la selección nacional tuvo que desarrollar una larga y dura carrera.
 Comenzó su carrera en la Eredivisie, primero en el Stormvogels Telstar, fichando en la temporada 91/92 por el AZ Alkmaar, donde permaneció dos temporadas, y al fin de su contrato, se quedó sin equipo profesional, lo que podría suponer que su carrera se fuese al traste. No fue así, Hasselbaink probó suerte en Portugal, fichó por el Campomaiorense y al año siguiente por el Boavista. En el equipo ajedrezado anotó 20 goles y se alzó con la Copa de Portugal, lo que llamó la atención de muchos otros equipos y le llevó a fichar por el Leeds United inglés. En la Premier desarrolló sus principales cualidades, una buena capacidad para el desmarque, una potencia extrema, y un disparo potente y sus dos buenas temporadas, la última alzándose con el trofeo de máximo goleador, con 18 goles, uno más que un joven Anelka que jugaba bajo las órdenes de Wenger en el Arsenal.

En el verano de 1999, un por entonces y como ahora, mal dirigido Atlético de Madrid, fichó al jugador por cerca de 3000 millones de pesetas, unos 18 millones de euros. Jimmy llegó al Atleti con la intención de darle el poder ofensivo que había perdido años atrás con la marcha de Vieri y con las continuas y desafortunadas lesiones de Kiko. El fichaje fue muy bien recibido por la afición atlética, que llevaba tiempo sin ver a algún jugador pegarle tan bien a la pelota, y por la continua  comparación que existía entre este y Anelka, que ese mismo verano firmó por el Real Madrid por unos 33 millones de euros, prácticamente el doble que Hasselbaink.
En esta comparación se podría dar como vencedor a Jimmy por su rendimiento individual, no en vano, anotó 24 goles, pero esa temporada fue de infausto recuerdo para Hasselbaink, y especialmente para el Atlético de Madrid.
La temporada fue nefasta, a pesar de contar con ciertos jugadores de mucha calidad (Baraja, Valerón, Capdevila, Solari..), el Atleti se situaba último en la tabla en la octava jornada de Liga. Hasselbaink era de lo poco que se salvaba del equipo, que ya en la primera jornada decepcionó a la afición cayendo en casa contra el Rayo. El empeño de Hasselbaink y algunos jugadores por salvar al equipo no fue suficiente, a pesar de hacer algún gran partido, como el 1-3 en el Bernabéu, donde el delantero anotó dos tantos y contribuyó a la última victoria atlética sobre el eterno rival. El equipo no funcionaba y estaba inmerso en numerosos problemas con la justicia debido a su fallecido presidente Jesús Gil. De hecho, el 22 de Diciembre el club fue intervenido y Jesús Gil ingresó en prisión. Las cosas fueron de mal en peor y a pesar de los goles de Hasselbaink, el Atleti necesitaba un milagro para salvar la categoría. Y el milagro no se dio. De hecho, la crueldad se cebó con Jimmy, ya que quizá el jugador que mejor temporada estaba haciendo (Ranieri dijo durante esa temporada que de no ser por Jimmy, el equipo habría descendido mucho antes), falló un penalti decisivo en el Carlos Tartiere ante un Oviedo dirigido, cosas de la vida, por Luis Aragonés, y consumó el descenso matemático del Atleti 66 años después.
La temporada de Hasselbaink en la liga española no acabó ahí, en la última jornada, una desencajada afición atlética mostró una gran pancarta en el partido de despedida de la Liga. Esta decía: Culpables, y entre ellos estaba Jimmy, que no pudo reprimir su tristeza al verse incluido en dicha lista. Aún hay más, al Atleti le quedaba la final de Copa, en Mestalla frente al Español, y lo que allí ocurrió, casi todos lo recuerdan, el gol de Tamudo robándole el balón de las manos a Toni, y el posterior tanto de Sergio, impidieron que el postrero gol de Hasselbaink le diera una pequeña alegría a una afición que no se creía su desdicha. Al fin del partido, las lágrimas de Hasselbaink tirado en el centro del campo, dejan una imagen desafortunadamente inolvidable para los aficionados atléticos.

Al año siguiente, volvió a Inglaterra, al Chelsea, donde siguió haciendo goles con facilidad, con ambas piernas, de lanzamientos de falta, incluso alguno de cabeza. Pasó a la historia del club londinense por ser el único jugador capaz de anotar un hattrick saliendo desde el banquillo. Tras cuatro temporadas, y 90 goles a sus espaldas dejó a los blues, y marchó al Middlesbrough y posteriormente al Charlton Athletic. Jimmy es el octavo máximo goleador de la Premier League con 127 goles y tras jugar en Segunda división inglesa con el Cardiff, el 15 de Septiembre de 2008, anunció su retirada.
Los aficionados al futbol y en especial los atléticos, nunca olvidaran a la denominada según Kiko Narvaez ‘’cara más negra del futbol’’, y aunque su imagen venga con la del descenso, el recuerdo de Jimmy, será el de Jimmy Pichichi Hasselbaink.

PATRICK KLUIVERT

Este enorme jugador nacido en Ámsterdam el 1 de julio de 1976, es uno de los mejores delanteros holandeses de las últimas décadas. De hecho, es máximo goleador de la historia de la selección Oranje.
Jugador de gran altura (1,88) y corpulencia, destacaba por su gran juego de espaldas, una exquisita técnica y un buen remate de cabeza. Siempre se le achacó falta de gol, pero si nos fijamos en sus cifras, siempre superiores a los 15 goles por temporada en sus buenos años, esa falta de gol quizá le habría convertido en uno de los mejores delanteros de la historia.

Kluivert comenzó a jugar en el equipo de su ciudad, y más famoso de Holanda, el Ajax de Ámsterdam, debutando a los 18 años y  formando parte del equipo histórico con jugadores como Overmars, Davids y Rijkaard y dirigido por Louis Van Gaal, que arrasaría en el campeonato doméstico, y que vio coronado reinado europeo con la consecución de la Copa de Europa del año 1995, en la que Kluivert fue el autor del único gol de la final contra el Milán, siendo el jugador más joven en marcar en una final de Copa de Europa. Con 19 años, era ya uno de los jugadores más cotizados del continente, y tras un mal año en Ámsterdam, fue fichado por el Milán de Capello en 1997. Allí la adaptación del delantero no existió, y tras un año prácticamente en blanco, fue traspasado por 2100 millones de pesetas, al Futbol Club Barcelona, dirigido por entonces por el mismo Louis Van Gaal que le hizo debutar en el Ajax.
En ese momento una enorme colonia de holandeses presentes en el club, facilitaron la adaptación de Kluivert y éste respondió con goles, y quizá con su mejor temporada, en la que anotó 15 dianas y su conexión con Rivaldo dio muchas tardes de gloria al Camp Nou. Tres años más siguió en el club de la ciudad Condal, pero poco a poco fue perdiendo esa conexión con la grada, y pese a que sus cifras de goles no disminuían, y dejaba numerosos detalles de clase por temporada, su importancia en el equipo fue cada vez menor. Su última temporada en Barcelona fue la peor. A las órdenes de su ex compañero Frank Rijkaard, anotó solo ocho goles, uno de ellos ayudó al Barça a ganar en el Bernabéu, y su salida era inminente.

El declive de Kluivert parecía evidente, y así fue, ficho por el Newcastle, pero solo duró una temporada, y así volvió a la Liga española, al Valencia de Quique Sánchez Flores. Su llegada prometía bastante, tuvo un inicio goleador pero poco a poco, su forma cayó y los rumores sobre sus continuas salidas nocturnas hicieron que Kluivert fracasara también en Mestalla.
De ahí de vuelta a Holanda, al PSV, donde parecía que podía recuperar algo de su carrera. No fue así, a pesar de lograr la Eredivisie, salió por la puerta de atrás tras discutir con Ronald Koeman y su destino final fue Francia, concretamente el Lille. Este fue su último equipo con el que consiguió anotar solamente cuatro tantos.
Con la selección holandesa su rendimiento fue mejor. Como decimos anteriormente, Kluivert es máximo goleador de la historia de Holanda, y participó en el mundial del 98, donde quedó cuarto, eliminado en semifinales por Brasil, donde anotó un gran gol de cabeza. También participo en tres Eurocopas; Inglaterra, Paises Bajos y Portugal, quedando máximo goleador en el 2000, en la Eurocopa cuyo anfitrión era Holanda.
En 2008 colgó las botas, dejando la sensación de haber podido ser un jugador aún más histórico (no es fácil ser el máximo goleador de Holanda; Van Nistelrooy, Cruyff, Van Basten, Bergkamp) y numerosos goles de bella factura.

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