De locos...

De locos...

Tras una vida dedicada a La Doce, la figura de Martín Palermo se va apagando mientras va llegando el final de su exitosa carrera. A pesar de seguir siendo un ídolo para la Bombonera y mantener su racha goleadora en el equipo de Julio César Falcioni. El Loco ha decidido colgar las botas para tristeza del deporte rey.

Martín nunca fue un jugador que destacara por una gran habilidad con los pies o sus gambetas, sino que su espíritu ganador y sobretodo su instinto de gol le ha llevado a coventirse en el máximo goleador de la historia de Boca Juniors.

Sus momentos más difíciles en el fútbol coincidieron con su salida de Argentina hacia España, concretamente aterrizó en un Villareal que comenzaba a dar sus primeros pasos para ser el club que hoy en día se encuentra en la zona noble de nuestro fútbol. Su comienzo en el Villareal fue prometedor pero tras festejar un gol frente al Levante en Copa del Rey con los aficionados el muro de separación cedió y Palermo saboreo el lado más amargo de este deporte lo que le condujo por un periplo para recuperar su nivel en el Betis y el Alavés donde nunca mostró el nivel que asombro a Europa en aquella final de la Intercontinental frente al Real Madrid en Tokyo que le situó en el primer escalafón mundial de delanteros.

Su regreso a Argentina no tardaría en llegar y no podía volver a otro lugar que no fuera el club de La Boca donde El Titán volvió a resurgir con grandes cifras goleadoras. Sus grandes actuaciones le sirvieron para que otro mito xeneize Maradona lo llamara para conseguir la clasificación para Sudáfrica 2010 de la selección Argentina, con su gol en el último instante ante Perú consiguió el pase mundialista para Argentina y le sirvió para resarcirse con la albiceleste tras el fatídico partido frente a Colombia en el que falló tres penas máximas. Aunque Maradona le volvió a permitir su último momento de gloria con la albiceleste citándolo para el Mundial de Sudáfrica y regalándole 10 minutos ante Grecia que le sirvieron para marcar su único gol en una cita mundialista.

Este domingo El Loco se despedirá de La Bombonera donde se han visto algunos de sus mejores tantos(cabe recordar su remate ante Banfield con Tévez como espectador de lujo o su gol de cabeza ante Vélez desde 40 metros). Cuando Palermo salte al campo vivirá sus últimos minutos ante su gente y a buen recaudo que a más de un seguidor se le caerá más de una lágrima por sus mejillas con sentimientos encontrados.
Lo dicho inicialmente el fútbol... un deporte de locos.

Santi Muñoz

http://www.youtube.com/watch?v=w1TuAAhXn0M&feature=related

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